Moniciones y Lecturas de este Domingo 04 de Septiembre del 2023 – Ciclo C

Tips Litúrgicos de día
Verde // XXIII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO; // Misa del domingo, Gloria, Credo, prefacio dominical. // Se prohíben las Misas de difuntos, excepto la exequial. // 1ª Lectura: Sb 9,13-18; Salmo: Sal 89; 2ª Lectura: Flm 9b-10.12-17; Evangelio: Lc 14,25-33
LITURGIA DE LAS HORAS: del domingo.
*Este año se omite la memoria de Santa Teresa de Calcuta, virgen.
MONICIÓN DE ENTRADA
¡Bienvenidos, hermanos y amigos! Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo derramen sobre todos nosotros su gracia y su paz.
Estamos en el Domingo Veintitrés del Tiempo Ordinario. La Liturgia de la Palabra de hoy nos habla de la verdadera sabiduría, la que es don de Dios y que consiste en conocer sus gustos y saber escoger lo mejor. La verdadera sabiduría consiste en decidirse por Jesucristo, en no mirar las baratijas a que estamos renunciando sino mantener la mirada fija en el inmenso tesoro que estamos ganando.
Seguros de la presencia de Jesús Resucitado, aquí y ahora, en medio de nosotros, pongámonos de pie para iniciar nuestra acción de gracias.
MONICIÓN PRIMERA LECTURA (Sabiduría 9,13-18)
La Primera Lectura nos deja clara una cosa: la sabiduría no es resultado de un esfuerzo, sino un regalo, un don de Dios. Escuchemos…
PRIMERA LECTURA
¿Quién comprende lo que Dios quiere?
Lectura del libro de la Sabiduría 9, 13-18
¿Quién conoce el designio de Dios?
¿Quién comprende lo que Dios quiere?
Los pensamientos de los mortales son mezquinos,
y nuestros razonamientos son falibles;
porque el cuerpo mortal es lastre del alma,
y la tienda terrestre abruma la mente que medita.
Apenas conocemos las cosas terrenas
y con trabajo encontramos lo que está a mano:
pues, ¿quién rastreará las cosas del cielo?
¿Quién conocerá tu designio,
si tú no le das sabiduría,
enviando tu santo espíritu desde el cielo?
Sólo así fueron rectos los caminos de los terrestres,
los hombres aprendieron lo que te agrada,
y la sabiduría los salvó.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial: Salmo 89, 3-4. 5-6. 12-13. 14 y 17 (R.: 1)
R. Señor, tú has sido nuestro refugio
de generación en generación.
Tú reduces el hombre a polvo,
diciendo: «Retornad, hijos de Adán».
Mil años en tu presencia
son un ayer, que pasó;
una vela nocturna. R.
Los siembras año por año,
como hierba que se renueva:
que florece y se renueva por la mañana,
y por la tarde la siegan y se seca. R.
Enséñanos a calcular nuestros años,
para que adquiramos un corazón sensato.
Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo?
Ten compasión de tus siervos. R.
Por la mañana sácianos de tu misericordia,
y toda nuestra vida será alegría y júbilo.
Baje a nosotros la bondad del Señor
y haga prósperas las obras de nuestras manos. R.
MONICIÓN SEGUNDA LECTURA (Filemón 9-10.12-17)
Hoy Pablo invita a Filemón, como cristiano, a una nueva sabiduría, a abrirse a una nueva relación que agrada a Dios: a tratar al esclavo como hermano. Escuchemos con atención…
SEGUNDA LECTURA
Recíbelo, no como esclavo, sino como hermano querido
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a Filemón 9b-10. 12-17
Querido hermano:
Yo, Pablo, anciano y prisionero por Cristo Jesús, te recomiendo a Onésimo, mi hijo, a quien he engendrado en la prisión; te lo envío como algo de mis entrañas.
Me hubiera gustado retenerlo junto a mí, para que me sirviera en tu lugar, en esta prisión que sufro por el Evangelio; pero no he querido retenerlo sin contar contigo; así me harás este favor, no a la fuerza, sino con libertad.
Quizá se apartó de ti para que lo recobres ahora para siempre; y no como esclavo, sino mucho mejor: como hermano querido.
Si yo lo quiero tanto, cuánto más lo has de querer tú, como hombre y como cristiano.
Si me consideras compañero tuyo, recíbelo a él como a mí mismo.
Palabra de Dios.
MONICIÓN EVANGELIO (Lucas 14,25-33)
Hoy Jesús advierte a la gente que evite seguirlo por entusiasmo o curiosidad, y deja bien sentadas las normas para los que lo quieran seguir. Quien se decida por Él debe saber muy bien a qué se compromete. Abramos los oídos, la mente y el corazón, y pongámonos de pie para la proclamación del Santo Evangelio.
Aleluya Sal 118, 135
Haz brillar tu rostro sobre tu siervo,
enséñame tus leyes.
EVANGELIO
El que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío
Lectura del santo evangelio según san Lucas 14, 25-33
En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo:
—«Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío.
Quien no lleve su cruz detrás de mí no puede ser discípulo mío.
Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla?
No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo:
«Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar».
¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil?
Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz.
Lo mismo vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío».
Palabra del Señor.
Gracias, por esta pagina esta muy buena para la liturgia de hoy. Siempre vamos mejorando . Que elSeñor te bendiga abundantemente.