¿Qué es un acólito?

Los acólitos son aquellas personas este ministerio instituído. El acólito tiene la autorización de servir en el altar, entregar la comunión, exponer y reservar el Santísimo Sacramento.

Fue el papa Paulo VI, en el Concilio Ecuménico Vaticano II, quien definió la figura del acólito como aquel laico o seminarista a quien el obispo le confiere mediante el rito litúrgico de la institución de acólito.

El Código de Derecho Canónico, en el canon 230 presenta una breve explicación sobre el acolitado,  “Los varones laicos que tengan la edad y las condiciones determinadas por la Conferencia Episcopal pueden ser llamados para el ministerio estable de lector y acólito, mediante el rito litúrgico prescrito; sin embargo la colación de esos ministerios no les da derecho a ser sustentados o remunerados por la Iglesia.”

Funciones del acólito

Los ministros están obligados a realizar una serie de labores dentro de la Iglesia, esto con el fin de apoyar al sacerdote en las labores que debe hacer durante la eucaristía. Los deberes básicos con los que se deben cumplir son:

-Servir en el altar durante la misa

-Colaborar con el diácono y sacerdote en la preparación de las liturgias

-Distribuir la Sagrada comunión a los fieles que participen de la eucaristía

-Podrá exponer el Santísimo Sacramento del Altar para que los fieles puedan adorarle

-Debe instruir a la congregación sobre la eucaristía y como se puede participar correctamente en los actos litúrgicos

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