Moniciones y lecturas para la Noche de Navidad – 24 de Diciembre de 2023 (Ciclo A)

NOCHE DE NAVIDAD – A
MONICIÓN DE ENTRADA
Bienvenidos, hermanos y amigos. Reciban todos ustedes gracia, paz y alegría de parte del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Un niño acaba de nacer. Su madre lo envuelve en pañales y lo recuesta en un pesebre. Ella se llama María y su padre, José. Ninguno de los tres tiene apariencia especial. Sin embargo, hoy es fiesta. Hoy nace la vida. Hoy es Navidad. ¡Con qué sencillez escribe Dios la historia de la salvación!
Pongámonos de pie para acoger con alegría a Jesús, Dios-con-nosotros.
MONICIÓN PRIMERA LECTURA (Isaías 9,1-3.5-6)
Isaías anuncia que en un niño amanece la sonrisa de Dios. La victoria es obra de un niño, príncipe de la justicia y de la paz.
Lectura del libro de Isaías 9, 1-3. 5-6
El pueblo que caminaba en tinieblas vio una luz grande; habitaban tierras de sombras, y una luz les brilló.
Acreciste la alegría, aumentaste el gozo: se gozan en tu presencia, como gozan al segar, como se alegran al repartirse el botín. Porque la vara del opresor, el yugo de su carga, el bastón de su hombro, los quebrantaste como el día de Madián.
Porque la bota que pisa con estrépito y la túnica empapada de sangre serán combustible, pasto del luego. Porque un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado: lleva al hombro el principado, y es su nombre: Maravilla de Consejero, Dios guerrero, Padre perpetuo, Príncipe de la paz. Para dilatar el principado con una paz sin límites, sobre el trono de David y sobre su reino.
Para sostenerlo y consolidarlo con la justicia y el derecho, desde ahora y por siempre. El celo del Señor lo realizará.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial: Salmo 95, 1-2a. 2b-3. 11-12. 13 (R.: Lc 2, 11)
R. Hoy nos ha nacido un Salvador:
el Mesías, el Señor.
Cantad al Señor un cántico nuevo,
cantad al Señor, toda la tierra;
cantad al Señor, bendecid su nombre. R.
R. Hoy nos ha nacido un Salvador:
el Mesías, el Señor.
Proclamad día tras día su victoria.
Contad a los pueblos su gloria,
sus maravillas a todas las naciones. R.
R. Hoy nos ha nacido un Salvador:
el Mesías, el Señor.
Alégrese el cielo, goce la tierra,
retumbe el mar y cuanto lo llena;
vitoreen los campos y cuanto hay en ellos,
aclamen los árboles del bosque. R.
R. Hoy nos ha nacido un Salvador:
el Mesías, el Señor.
Delante del Señor, que ya llega,
ya llega a regir la tierra:
regirá el orbe con justicia
y los pueblos con fidelidad. R.
R. Hoy nos ha nacido un Salvador:
el Mesías, el Señor.
MONICIÓN SEGUNDA LECTURA (Tito 2,11-14)
Jesús es la gracia de Dios que trae la salvación al mundo. Desde ahora nuestra carne es su carne. Escuchemos…
SEGUNDA LECTURA
Ha aparecido la gracia de Dios a todos los hombres
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a Tito 2, 11-14
Ha aparecido la gracia de Dios, que trae la salvación para todos los hombres, enseñándonos a renunciar a la impiedad y a los deseos mundanos, y a llevar ya desde ahora una vida sobria, honrada y religiosa, aguardando la dicha que esperamos: la aparición gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro, Jesucristo.
Él se entregó por nosotros para rescatarnos de toda maldad y para prepararse un pueblo purificado, dedicado a las buenas obras
Palabra de Dios.
MONICIÓN EVANGELIO (Lucas 2,1-14)
El ángel del Señor nos trae esta Buena Noticia: “¡Hoy les ha nacido el Salvador!” Abramos el oído, la mente y el corazón, y pongámonos de pie para la proclamación del Santo Evangelio.
Aleluya Lc 2, 10-11
Os traigo una buena noticia,
una gran alegría: nos ha nacido un Salvador:
el Mesías, el Señor.
EVANGELIO
Lectura del santo evangelio según san Lucas 2, 1-14
En aquel tiempo, salió un decreto del emperador Augusto, ordenando hacer un censo del mundo entero.
Éste fue el primer censo que se hizo siendo Cirino gobernador de Siria. Y todos iban a inscribirse, cada cual a su ciudad.
También José, que era de la casa y familia de David, subió desde la ciudad de Nazaret, en Galilea, a la ciudad de David, que se llama Belén, en Judea, para inscribirse con su esposa María, que estaba encinta. Y mientras estaba allí le llegó el tiempo del parto y dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no tenían sitio en la posada.
En aquella región había unos pastores que pasaban la noche al aire libre, velando por turno su rebaño.
Y un ángel del Señor se les presentó; la gloria del Señor los envolvió de claridad, y se llenaron de gran temor.
El ángel les dijo:
«No temáis, os traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre».
De pronto, en torno al ángel, apareció una legión del ejército celestial, que alababa a Dios, diciendo:
«Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor».
Palabra del Señor.
Reflexión del Domingo de Navidad
La navidad es uno de los tiempos del año más hermosos. Es un tiempo en el que se promueven los buenos deseos, el compartir, el hacer el bien. Es un tiempo también al cuál se le ha querido sacar el jugo desde la mercadotécnia, buscando que compremos cosas que no necesitamos. Me llama poderosamente la atención la frase que le he escuchado a algunas personas: «Hay que vestir la navidad», que consiste en comprar luces, hacer regalos y adornar la casa. Aunque la decoración de los espacios físicos forman parte de la preparación y espera del niño Dios, la navidad no se viste, la navidad es un acontecimiento que recordamos y hacemos presente (conmemoramos) como cristianos porque creemos que es el acontecimiento más importante de la humanidad, la encarnación. Festejamos que Dios siendo de categoría divina se ha hecho hombre y ha nacido en un pesebre. Hoy es la noche de paz, la noche de la esperanza, la noche en la que creemos que un mundo mejor es posible. Es la noche del bebé que nació del vientre de María. Feliz Navidad para ti. Padre José Toro

























hola, muy buenas las publicaciones,que dan cada dia